Las empresas normalmente toman decisiones para maximizar la utilidad a obtener de cada venta, pero no siempre contemplan la diferencia que existe entre los tiempos de facturación y cobranza, lo que a veces llega a ponerlos en situaciones complicadas, en donde el efectivo disponible para pagar deudas y gastos resulta ser muy poco.
Es por ello que hay que comprender cómo funcionan los ciclos operativos y la conversión de efectivo; además de cómo aprovecharlos para generar una mayor estabilidad que dé paso a un fuerte y sólido crecimiento.
A continuación te compartimos un esquema que ejemplifica cómo puede comportarse dicho ciclo.
Para determinar cuán largo es el ciclo operativo, habrá que contemplar todo el ciclo de inventario, desde su compra a la venta y hasta la cobranza a los clientes. En otras palabras, la suma del ciclo de inventario más del ciclo de cuentas por cobrar; lo que nos permite observar cuánto tiempo nos toma realizar toda nuestra operación, así como encontrar los procesos donde podemos realizar optimizaciones para maximizar la productividad.
De igual manera se tiene el ciclo de conversión de efectivo, mismo que se puede calcular al restar al ciclo operativo, el número de días promedio en el que se hace el pago a proveedores. Este ciclo nos permitirá comprender qué tan rápido estamos obteniendo liquidez mediante nuestras operaciones.
Escucha la entrevista que explica mucho más acerca de este tema. "Lo que debes saber para aumentar tus ganancias" con Javier Vázquez Rapp.
El beneficio de conocer estos indicadores radica en poder comprender cómo volver nuestra operación más eficiente, a fin de que nuestros activos y recursos sean más productivos.
Como ejemplo tenemos a empresas como OXXO o Walmart, quienes tienen solo 7 días de inventario en sus tiendas y cobran de forma inmediata a sus clientes, pero realizan el pago a sus proveedores a 90 días, lo que les permite tener casi 3 meses para invertir el dinero que han recibido y generar mayores utilidades.
Esa es una de las máximas en el mundo de la productividad financiera: cobrar rápido, pagar lento y aprovechar ese tiempo para hacer el dinero más productivo. Para ello, hay que integrar estrategias y herramientas que faciliten la maximización de utilidades.
Una de esas herramientas es el factoraje financiero, un modelo que te permite obtener liquidez casi inmediata al realizar ventas a crédito. Para conocer más, te compartimos nuestro eBook “Todo lo que debes saber sobre el Factoraje Financiero”.
Las empresas normalmente toman decisiones para maximizar la utilidad a obtener de cada venta, pero no siempre contemplan la diferencia que existe entre los tiempos de facturación y cobranza, lo que a veces llega a ponerlos en situaciones complicadas, en donde el efectivo disponible para pagar deudas y gastos resulta ser muy poco.
Es por ello que hay que comprender cómo funcionan los ciclos operativos y la conversión de efectivo; además de cómo aprovecharlos para generar una mayor estabilidad que dé paso a un fuerte y sólido crecimiento.
A continuación te compartimos un esquema que ejemplifica cómo puede comportarse dicho ciclo.
Para determinar cuán largo es el ciclo operativo, habrá que contemplar todo el ciclo de inventario, desde su compra a la venta y hasta la cobranza a los clientes. En otras palabras, la suma del ciclo de inventario más del ciclo de cuentas por cobrar; lo que nos permite observar cuánto tiempo nos toma realizar toda nuestra operación, así como encontrar los procesos donde podemos realizar optimizaciones para maximizar la productividad.
De igual manera se tiene el ciclo de conversión de efectivo, mismo que se puede calcular al restar al ciclo operativo, el número de días promedio en el que se hace el pago a proveedores. Este ciclo nos permitirá comprender qué tan rápido estamos obteniendo liquidez mediante nuestras operaciones.
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Como ejemplo tenemos a empresas como OXXO o Walmart, quienes tienen solo 7 días de inventario en sus tiendas y cobran de forma inmediata a sus clientes, pero realizan el pago a sus proveedores a 90 días, lo que les permite tener casi 3 meses para invertir el dinero que han recibido y generar mayores utilidades.
Esa es una de las máximas en el mundo de la productividad financiera: cobrar rápido, pagar lento y aprovechar ese tiempo para hacer el dinero más productivo. Para ello, hay que integrar estrategias y herramientas que faciliten la maximización de utilidades.
Una de esas herramientas es el factoraje financiero, un modelo que te permite obtener liquidez casi inmediata al realizar ventas a crédito. Para conocer más, te compartimos nuestro eBook “Todo lo que debes saber sobre el Factoraje Financiero”.
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